La desvelada de anoche

El sábado pasado llevamos a Nicolás con el pediatra para que le pusiera la vacuna de la influenza, a la mera hora también le hacía falta la vacuna contra el neumococo, así es que mi pequeño salió con dos piquetes, uno en las pompis y otro en el brazo. En fin, al pobre siempre le hacen reacción las vacunas, así es que ayer estuvo muy decaído, con tos y algo de fiebre.

Para acabarla de amolar el clima estuvo horrible el domingo (y hoy también), así es que decidimos quedarnos en casita. Como siempre, cuando los peques están enfermitos, no disfrutamos tanto del descanso como  habríamos querido.

Nicolás no se la pasó bien, devolvió flemas un par de veces y tuvimos que bañarlo otras tantas para bajarle la fiebre y aprovechar para lipiarlo. Se quedó dormido por ahí de las 8 de la noche, pero a las 10 ¡volvió a despertarse!. Lo bueno es que despertó con muhco ánimo, lo malo es que yo me disponía a dormir y no se me hizo.

Después de jugar un rato con él y prepararle un biberón con leche yo ya no podía más y el chamaco seguía feliz por la vida sin señales de querer dormir. En un acto desesperado, lo acosté junto a mí en el sillón y prendí la tele. Por casualidad llegué al canal de Baby First TV y me di cuenta que a esas horas de la noche solamente tienen una programación "para la hora de dormir" y aunque yo estaba un poco escéptica, me sorprendió que los programitas de dibujitos y música clásica ¡sí funcionaron!... en 15 minutos Nicolás estaba profundamente dormido.

Cerca de la media noche pude acostar en su cuna a mi niño y yo pude ir a dormir a mi camita. Así es que ya saben, si algún día se encuentran en una situación similar, ya tienen una alternativa que tal vez les funcione.

Un poco perjudicada por la desvelada, se despide La Mamá de Nicolás.