Las vacaciones están a punto de terminar y pronto regresaré a impartir clases, así es que he tenido que organizar muchas cosas, preparar mis clases y arreglar mis materiales. Entre mis curiosidades tenía una carpeta de cartón reciclado que utilizaba para guardar mis papeles, pero la verdad ya estaba muy maltratada, por lo que decidí que era un buen momento para renovarla (o restaurarla o rescatarla jajaja). Hoy les comparto mi pequeño proyecto y quizá ustedes también puedan hacerlo, es muy sencillo.
MATERIAL
- Carpeta o fólder viejo
- Papel para envolver (en mi caso elegí uno reciclado)
- Pegamento para encuadernar
- Pincel
- Tijeras
PROCEDIMIENTO
- Debes tomar las medidas de la carpeta que hayas elegido y aumentarle uno o dos centímetros de cada lado.
- Una vez que tengas las medidas exactas recorta un pedazo de papel de este tamaño.
- Coloca la carpeta en medio del pedazo de papel y pégalo con un poco de pegamento diluído con agua y dobla el excedente hacia adentro.
- Recorta el papel sobrante para que tenga un mejor terminado tu trabajo.
- Pega el papel que doblaste a la carpeta.
DETALLES
- Cuando pegues el papel no tardes mucho tiempo en alisarlo porque seca rápidamente. Para hacerlo puedes utilizar un plegador o un pedazo de plástico liso.
- Si tu carpeta tiene pestañas recuerda que no debes pegarlo con el papel, recorta en el lugar indicado para que queden funcionales.
- Puedes reforzar el lomo de la carpeta colocando un poco de papel en medio. Toma la medida exacta y pégalo con el mismo pegamento.
Como ves es muy fácil hacerlo, puedes intentarlo en cualquier momento, ahorrar dinero y ser ecológica.
Reutilizando, se despide La Mamá de Nicolás.
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